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Buena pronunciación, solución para malos entendidos

En un mundo globalizado, en el que el inglés es el idioma predominante de intercambio comercial y profesional, ¿es importante tener una buena pronunciación?

La pregunta es lícita. Bien podríamos pensar que la combinación adecuada  de ciertas  palabras, tal como si cifráramos un código, debería alcanzar para establecer una comunicación exitosa.

Sin embargo, esto no resulta suficiente. Hablar en otro idioma también es un hecho social y es en el habla cuando la comunicación se nutre de otros recursos que completan el sentido de lo que se está diciendo. La entonación, la gestualidad, el tono o el volumen, agregan información y direccionan el mensaje: todo cuenta, incluso la pronunciación.

Si estamos inmersos en el mundo de los negocios o en otros terrenos, como el de la medicina, por poner un ejemplo, es de suma importancia pronunciar bien en inglés o en cualquier idioma extranjero. Sabemos que un error de pronunciación o un false friend pueden generar confusión y terminar en malentendidos.

Pero cuidado, es necesaria una aclaración para llevar calma a todos aquellos que sienten pudor al hablar en otro idioma en público: pronunciar bien no es equivalente a tener un acento nativo.

Por más que tengamos un excelente nivel de inglés, como hablantes no nativos siempre vamos a tener un acento que va a dejar en evidencia nuestro origen.

Desde ya, una correcta pronunciación es la clave para una buena comunicación, pero no hay que exigirse imposibles ni olvidar el contexto.

La comunicación en un idioma extranjero está relacionada con un propósito. En el mundo de los negocios, por ejemplo, el inglés usado es casi como una “lengua franca”, es decir, más formal y neutral, para que todas las personas puedan comprenderlo sin importar su procedencia.

Hablar en otro idioma es un paso importante, tan importante como lograr que la presión por tener una pronunciación nativa no te paralice. Las capacitaciones online de Utalk, tanto las personales como las empresariales, fomentan la conversación, una de las mejores formas de perfeccionar la pronunciación.